Si tienes un apartamento en la playa y estás buscando ideas para decorarlo, de cara a poder pasar cómodamente el verano en la costa, te dejamos algunos consejos e ideas que te pueden servir.
Lo primero que hay que hacer es estudiar la estructura y disposición de la vivienda y si hay posibilidad de abrir estancias, tales como unir la cocina al salón, convertir una salita en un cuarto de invitados o poder ampliar la terraza, el balcón o jardín, porque será una de las estancias más utilizadas en los meses de verano, hacerlo.
Si la cocina y el salón pueden unirse, servirá para que los invitados y la familia puedan compartir espacio mientras unos cocinan y otros esperan, aprovechando para tomar un vino o un picoteo. Si el jardín o terraza se puede ampliar, igualmente será uno de los espacios más solicitados por todos los que acudan a casa, porque cuando el sol aprieta y las temperaturas son altas, se agradece estar al aire libre.
Si hay habitaciones de más, aparte de las que dediquemos a los miembros habituales de nuestra familia, es aconsejable convertir estas estancias en lugares totalmente versátiles. Si queremos tener un despacho, lo ideal sería que cuente con un sofá cama o una estructura tipo mueble que igualmente se convierta en cama. Si dedicamos una habitación para los más pequeños, podemos utilizar literas u otros modelos que permiten que duerman varios niños en una misma cama.
Si te preguntas sobre los colores a utilizar, siempre hay que optar por colores y tonos cálidos y claros: blanco, crema, tierra, marrón suave. Además, se puede hacer una combinación (muy de películas románticas de Hollywood) con tonos verdes o azules. En este último caso podemos hablar incluso de dar un toque náutico o marinero a las estancias principales, como la cocina o el salón. Y a ser posible, toallas, ropa de cama y cortinas, en colores claros, que atenúan el calor y las altas temperaturas.
Igualmente, en este tipo de viviendas, que utilizamos principalmente unos meses, concretamente en verano, y quizás algunos fines de semana sueltos el resto del año, se prefiere que la decoración sea minimalista y a ser posible, que esté realizada con materiales resistentes, para que aguanten el intenso ir y venir de visitantes.